Me he permitido un divertimento con la clase política catalana, reunirlos no ha sido fácil, no se ponen de acuerdo en absoluto. Unos más que otros, nos están haciendo la vida cada día más, si cabe, imposible. La próxima vez, quizás, les ponga un patíbulo de fondo, como en la Revolución Francesa.
Pido permiso para difundir su trabajo.
ResponderEliminarJorge Aberingi
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